En un pueblo de cuyo nombre no quiero acordarme, dormía una linda dama... (la cual por supuesto era yo).
Corría el mes de octubre del año 2016, y cómo ya muchos saben, por esta época estaba haciendo unos recorridos por el Valle de Cauca, así que en algunas ocasiones me tocaba dormir por fuera. Justo la noche anterior al impase que les voy a contar, nos había tocado dormir con mi compañera Manuela en un hotelito de dudosa reputación, pero lo grave no era su reputación sino su estado de limpieza!!! Es obvio que el presupuesto no ayudaba mucho, pero también son pueblos que no cuentan con una buena infraestructura así que no había mucho para escoger.
La noche se me hizo larga, intentaba no despertarme para no recordar donde estaba y a la mañana siguiente me alisté tan rápido que ni siquiera recuerdo si me bañé... bueno y como seguro era con agua fría, pues peor...
El caso es que a la noche siguiente llegamos a otro pueblo donde nos hospedamos en un hotel que nos recomendaron, el lugar era sencillo pero sobretodo era muy aseado, o bueno no se si tanto, pero comparado al del día anterior era como haber llegado a un Hilton!!! (muy hipotéticamente hablando)
llegamos al pueblo antes de caer la tarde, así que después de instalarnos salimos con nuestros compañeros a buscar algo para comer, comimos rápido y nos dirijimos de nuevo al hotel, había sido un día pesado y la madrugada al día siguiente era muy temprano.
Corría el mes de octubre del año 2016, y cómo ya muchos saben, por esta época estaba haciendo unos recorridos por el Valle de Cauca, así que en algunas ocasiones me tocaba dormir por fuera. Justo la noche anterior al impase que les voy a contar, nos había tocado dormir con mi compañera Manuela en un hotelito de dudosa reputación, pero lo grave no era su reputación sino su estado de limpieza!!! Es obvio que el presupuesto no ayudaba mucho, pero también son pueblos que no cuentan con una buena infraestructura así que no había mucho para escoger.
La noche se me hizo larga, intentaba no despertarme para no recordar donde estaba y a la mañana siguiente me alisté tan rápido que ni siquiera recuerdo si me bañé... bueno y como seguro era con agua fría, pues peor...
El caso es que a la noche siguiente llegamos a otro pueblo donde nos hospedamos en un hotel que nos recomendaron, el lugar era sencillo pero sobretodo era muy aseado, o bueno no se si tanto, pero comparado al del día anterior era como haber llegado a un Hilton!!! (muy hipotéticamente hablando)
llegamos al pueblo antes de caer la tarde, así que después de instalarnos salimos con nuestros compañeros a buscar algo para comer, comimos rápido y nos dirijimos de nuevo al hotel, había sido un día pesado y la madrugada al día siguiente era muy temprano.
Llegamos al hotel dispuestos a descansar, pero casi sin darnos cuenta un hombre entró detrás de nosotros, casi cómo si hiciera parte del grupo, mientras nosotros pedíamos las llaves, él aprovechó para preguntar a la chica de la recepción si ahí estaba hospedada una mujer X, con un hombre Y, y a la muy ingenua, se le ocurrió decir que SI y de paso darle el número de la habitación!!!! Osea, burrada completa... en ese instante una compañera muy inteligentemente se dio cuenta de la situación y nos sacó a todos de ahí y nos llevó a un comercio cercano a esperar a que el tipo se fuera, desde ahí nos dimos cuenta de que la dueña del hotel llegó en ese instante y no lo dejó subir... pero acaso el hombre (si era lo que imaginábamos) no estaría ya tal vez maquinando que hacer???
Después de que se retiró, nosotros volvimos al hotel, pero la idea de dormirnos temprano se fue y al contrario nos juntamos todos en la habitación más alejada de donde estaban los susodichos, con el temor de que nos tocará de pronto ser testigos de un crimen pasional!!!
Yo estaba muy cansada, así que decidí irme a mi habitación la cual compartiría con Manuela, ella se quedó otro rato con ellos... yo no podía estar tranquila, qué tal que ese hombre volviera??? y si se equivocaba de habitación??? y qué tal que yo me pareciera a la vieja??? la verdad estaba preocupada, no sabía que hacer para parecerme lo menos posible a una fulana que ni siquiera conocía... no sabía si soltarme el pelo, o cogérmelo; si ponerme las gafas, o ponerme mi peor pinta... en fin, cualquier cosa que me hiciera ver distinta a ella!!!
Manuela volvió casi a media noche, yo ya casi dormía, pero igual no pude hacerlo hasta que ella no regresó y pudimos ponerle todos los seguros a la puerta. Yo ya dormía y ella aún miraba su celular, cuando de repente escucho que grita... yo abrí mis ojos y en un segundo la vi parada encima de su cama!!! por supuesto que me asusté y ella me dijo que había sentido algo, como un animal en sus pies y encima de la cama... A mi me pareció extraño, pero como buena compañera la acogí en mi cama después de que me pidió que la dejara dormir conmigo.
No habían pasado 5 minutos, cuando de repente estaba de nuevo parada (ahora en mi cama) y gritaba que ahí iba, que era un ratón!!! Ante esas palabras, en menos de un segundo yo también estaba parada en la cama, ya habíamos prendido la luz, ella ya se había pasado a la de ella (para tener 2 frentes de ataque) y hasta cada una tenía un zapato en la mano... de repente el muy osado comenzó a correr de un lado para otro y nosotras a gritar como locas (normal, como 2 viejas cuando ven un ratón).
Nosotras nos movíamos de un lado para otro y el ratón también, no nos atrevíamos a dispararle y él no sabía para donde ir... después de tal vez 10 eternos segundos, el ratón salió por debajo de la puerta, así que sin pensarlo pusimos toalllas para trancarle la entrada por si decidía volver!!!
Volvimos a nuestras camas y pudimos volver a dormir!!!
La visita de este pequeño ratoncito (ah, no había comentado que era pequeñito?), fue inesperada, y por lo menos al otro día pude contarle la anécdota a mi hijo, diciéndole que el ratón Pérez se había confundido y me había visitado a mi!!!
Después de que se retiró, nosotros volvimos al hotel, pero la idea de dormirnos temprano se fue y al contrario nos juntamos todos en la habitación más alejada de donde estaban los susodichos, con el temor de que nos tocará de pronto ser testigos de un crimen pasional!!!
Yo estaba muy cansada, así que decidí irme a mi habitación la cual compartiría con Manuela, ella se quedó otro rato con ellos... yo no podía estar tranquila, qué tal que ese hombre volviera??? y si se equivocaba de habitación??? y qué tal que yo me pareciera a la vieja??? la verdad estaba preocupada, no sabía que hacer para parecerme lo menos posible a una fulana que ni siquiera conocía... no sabía si soltarme el pelo, o cogérmelo; si ponerme las gafas, o ponerme mi peor pinta... en fin, cualquier cosa que me hiciera ver distinta a ella!!!
Manuela volvió casi a media noche, yo ya casi dormía, pero igual no pude hacerlo hasta que ella no regresó y pudimos ponerle todos los seguros a la puerta. Yo ya dormía y ella aún miraba su celular, cuando de repente escucho que grita... yo abrí mis ojos y en un segundo la vi parada encima de su cama!!! por supuesto que me asusté y ella me dijo que había sentido algo, como un animal en sus pies y encima de la cama... A mi me pareció extraño, pero como buena compañera la acogí en mi cama después de que me pidió que la dejara dormir conmigo.
No habían pasado 5 minutos, cuando de repente estaba de nuevo parada (ahora en mi cama) y gritaba que ahí iba, que era un ratón!!! Ante esas palabras, en menos de un segundo yo también estaba parada en la cama, ya habíamos prendido la luz, ella ya se había pasado a la de ella (para tener 2 frentes de ataque) y hasta cada una tenía un zapato en la mano... de repente el muy osado comenzó a correr de un lado para otro y nosotras a gritar como locas (normal, como 2 viejas cuando ven un ratón).
Nosotras nos movíamos de un lado para otro y el ratón también, no nos atrevíamos a dispararle y él no sabía para donde ir... después de tal vez 10 eternos segundos, el ratón salió por debajo de la puerta, así que sin pensarlo pusimos toalllas para trancarle la entrada por si decidía volver!!!
Volvimos a nuestras camas y pudimos volver a dormir!!!
La visita de este pequeño ratoncito (ah, no había comentado que era pequeñito?), fue inesperada, y por lo menos al otro día pude contarle la anécdota a mi hijo, diciéndole que el ratón Pérez se había confundido y me había visitado a mi!!!